“De residuo a recursos en tiempos de cambio climático: Valorización del orujo de uva en la ganadería”, se denomina la investigación que lidera el Dr. Jorge Ávila Stagno, del Departamento de Ciencia Animal de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Concepción, que gracias a recursos del proyecto CORFO Bienes Públicos, está avanzando en la transformación del orujo de uva —residuo generado por la industria vitivinícola— en suplementos funcionales para alimentación animal.

En este contexto es que recientemente se realizó un taller práctico de difusión sobre las potencialidades de este subproducto de la industria agroalimentaria. “Nosotros estamos evaluando el orujo de uva para transformarlo en recursos útiles para ser incorporados en dietas y estrategias de alimentación de rumiantes, esto porque el orujo de uva al tener polifenoles modifica los procesos digestivos de los animales, reduce las emisiones de metano, reduce la eliminación de amoníaco, mejora los perfiles de ácidos grasos en los productos finales haciéndolos más saludables para el consumidor, y también mejora el bienestar animal. Esos experimentos son lo que estamos mostrando hoy día. Aún no tenemos los resultados definitivos, solo resultados preliminares, pero el 2026 es lo que presentaremos a representantes del mundo de la vitivinicultura y la ganadería”, explicó el Dr. Jorge Ávila.

Durante el desarrollo del taller, el Director del Departamento de Ciencia Animal, de Veterinaria UdeC, Dr. Rodrigo Allende Vargas, manifestó que “este proyecto nos ha permitido tres elementos relevantes; el primero es contar con financiamiento para realizar investigación y desarrollo, el segundo elemento es conocer la problemática de los viñateros del Valle del Itata, lo cual está asociado con este proyecto de investigación y una tercera situación que nos interesa mucho es que existirá una plataforma para que podamos entregar la información  hacia el sector primario vitivinícola”.

Al taller asistieron, representantes del área de la vitivinicultura, del mundo de la academia, de la ganadería y autoridades Corfo e Indap, así como también de la Seremi de Agricultura Ñuble, que encabeza Antonio Arriagada Vallejos, quien destacó que “hemos estado apoyando desde la Seremía de Agricultura  fundamentalmente buscando alternativas para la industria viñatera del Valle del Itata y los resultados preliminares son promisorios  en el uso del residuo de la uva para  la alimentación animal”.

Por su parte, el académico de la Facultad de Ingeniería Civil Agrícola de la UdeC, Pedro Melín Marín, indicó que “en el caso de nuestra facultad, me ha correspondido ver el tratamiento de estabilización del orujo de uva, mediante el prensado y secado en condiciones controladas para posteriormente determinar tiempos de deshidratación y en qué condiciones queda el material luego de haber sido secado para poder preparar dos materiales. Uno que es la pepa de uva y el otro que es el orujo que queda para poder ser molido para dárselo a animales en ensayos”.

Durante la jornada los asistentes pudieron conocer que el orujo de uva es rico en antioxidantes, polifenoles, catequinas, taninos entre otros elementos que modifican la fermentación del rumen y modifican el estatus sanitario de los animales y por lo mismo reduce el impacto que producen sus gases en el calentamiento global.

Proyecto IFI de CORFO

Asociado a este taller práctico, se realizó el lanzamiento del “Taller de Innovación en el Itata: nuevos productos y economía circular”, proyecto de extensión que han iniciado expertos de Agronomía UdeC.

Sobre ello la Dra. Sandra Suescún Ospina del Departamento de Producción Animal de la Facultad de Agronomía explicó que “hemos venido trabajando en evaluaciones del orujo de uva en la alimentación animal desarrollando tesis con estudiantes y recientemente nos incorporamos al desarrollo de un componente de un proyecto IFI Itata en unión con el Departamento de Producción Vegetal de Agronomía y hoy realizamos un primer taller de lanzamiento donde estamos contándoles a las personas estrategias de diversificación productiva para el Valle del Itata con base en las uvas en donde estamos orientados al desarrollo de jugos funcionales con uvas patrimoniales  (Moscatel y País)  y posteriormente el uso de esos residuos de la producción de los jugos  para transformarlos en estrategias de alimentación animal, pensando por ejemplo en raciones totalmente mezcladas, bloques multi nutricionales y ensilajes con orujo de uva”.

Sobre este proyecto de diversificación productiva, el académico y enólogo de Agronomía UdeC, Dr. Guillermo Pascual agregó que,  “tomamos los residuos del vino para hacer nuevos productos, en este caso la idea es hacer jugo de uva, pero también bloques concentrados de orujo de uva para la alimentación animal bovina, ovina, caprina y monogástricos”.

De esta forma, la articulación de ambas iniciativas permite una cobertura integral de los objetivos planteados, logrando que la investigación científica y la extensión vinculante no operen como ejes aislados, sino como un engranaje sistémico.

Más de 200 ejemplares en promedio se derivan anualmente desde el Servicio Agrícola y Ganadero hacia el Centro de Rehabilitación y Educación de Fauna Silvestre Andes UdeC, en un trabajo conjunto que apunta al resguardo de nuestra fauna silvestre en casos de accidentes o emergencia. En ese contexto, autoridades del Servicio Agrícola y Ganadero, SAG y de la Universidad de Concepción firmaron en dependencias de la Facultad de Ciencias Veterinarias del Campus Chillán, un convenio de colaboración que les permitirá continuar desarrollando iniciativas conjuntas con el Centro de Rehabilitación y Educación de Fauna Silvestre ANDES-UdeC.

El SAG tiene por objetivo contribuir al desarrollo silvoagropecuario del país, mediante la protección, mantención e incremento de la salud animal y vegetal; la protección y conservación de los recursos naturales renovables que inciden en el ámbito de la producción agropecuaria del país y el control de insumos y productos agropecuarios sujetos a regulación en normas legales y reglamentarias.

De la misma forma, el Centro de Rehabilitación y Educación de Fauna Silvestre ANDES-UdeC, tiene el compromiso con la educación en el rescate, rehabilitación y la liberación de ejemplares de fauna silvestre rehabilitados a su medio ambiente.

En este marco, fue que se celebró este convenio de colaboración orientado al cumplimiento de sus fines en común, mediante los compromisos referidos al cuidado de la fauna silvestre de la Región, mediante el desarrollo de acciones coordinadas para el rescate y rehabilitación de especies protegidas.

Adicionalmente y como parte de un mejor accionar, a partir de este año, el convenio se ejecuta a través de la entrega de insumos avaluados en 2.000.000, dos millones de pesos, para ser entregados en forma anual a la Universidad de Concepción, en específico al Centro de Rehabilitación de Fauna Silvestre (CRFS), así como la realización de otras actividades de coordinación conjunta entre ambas instituciones.

En este contexto el Ddirector regional del Servicio Agrícola y Ganadero, Osvaldo Alcayaga Benavente destacó que, “la alianza y el trabajo con la academia es esencial para generar condiciones óptimas en nuestra región, de procesos que van más allá de un rescate, que apuntan a valores compartidos, tiene que ver con el medio ambiente y con la formación de las futuras generaciones”.

Por su parte, el Subdirector de la Universidad de Concepción, Dr. Daniel Sandoval Silva manifestó que, “como Universidad de Concepción, este convenio es muy significativo, representa una alianza necesaria para el crecimiento y para abordar problemáticas de la sociedad. Esta alianza colaborativa es fruto de un trabajo de larga data y, es un elemento clave para seguir avanzando en el futuro.  En este contexto, nuestra universidad se preocupa no solo de mantener y resguardar las especies, sino también de formar a sus estudiantes y capacitar a profesionales tanto en Chile como en el extranjero. Para que esta senda continúe, necesitamos de estas alianzas estratégicas”, destacó el Subdirector del Campus durante la firma de convenio.

También presente en la ceremonia, el Seremi de Agricultura de Ñuble, Antonio Arriagada Vallejos valoró esta alianza público privada: “Es muy bueno establecer este trabajo y hacerlo permanente en el tiempo, porque ambas instituciones cumplen un rol fundamental para la gestión y protección del medio ambiente”.

Finalmente, el Decano de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Concepción, Dr. Patricio Rojas Castañeda puso énfasis en que “los convenios de colaboración no son solo acuerdos firmados. Se trata de trabajar juntos y de unir fuerzas y capacidades para lograr transformar y concretar resultados que se esperan”.

ANDES-UdeC

Desde la perspectiva del Centro de Rehabilitación y Educación de Fauna Silvestre ANDES-UdeC, la Dra. Paula Aravena Bustos, quien lo lidera explicó que, “nosotros tenemos 21 años de trabajo continuo. Es un trabajo por la fauna de los 365 días del año y no es un trabajo convencional, es un área de la medicina veterinaria que se ha ido desarrollando en los últimos años en vista de una necesidad y de mayor conocimiento. Mientras más sabemos cómo funcionan los ecosistemas, más entendemos lo importante que es que esta fauna gratuitamente trabaja para nosotros; en la conservación del ecosistema, movimiento de energía, en las cadenas trópicas, fertilización del suelo, regeneración de los bosques después de los incendios forestales, de ahí que estos convenios de colaboración tengan tanta importancia”, comentó la Dra. Aravena quien agregó que hay considerar el impacto de la fauna silvestre.

“Un paciente que hoy tiene un gasto de un millón de pesos en su tratamiento, aporta cerca de 90 millones de pesos en restauración forestal a lo largo de su vida, entonces a veces no se ve ese equilibrio o desequilibrio que hay entre lo que nosotros podemos hacer con ellos y lo que ellos hacen por nosotros permanentemente, por eso nuestra función como ANDES-UdeC es continuar trabajando por su preservación, ya que contribuyen a mantener la biodiversidad”, puntualizó.

-La tenencia responsable de mascotas también pasa por la responsabilidad de los tutores de saber alimentarlos adecuadamente.

Con la llegada de las fiestas de fin de año, la magia culinaria se extiende y hasta las mascotas de la casa sienten el espíritu de las celebraciones y de las sabrosas preparaciones que las acompañan, y por lo mismo es importante no olvidar que la alimentación de nuestros perros y gatos es mucho más que simplemente llenar un recipiente; se trata de su bienestar físico y mental a largo plazo.

Una dieta nutricionalmente completa y equilibrada proporciona la energía necesaria para la actividad física, mantiene un pelaje brillante, huesos fuertes y un sistema inmunológico robusto que puede protegerlos contra enfermedades. Así lo explicó la médico veterinaria y directora del Hospital Clínico Veterinario de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad de Concepción, Dra. Yessica Muñoz, quien dijo que “igual siempre hay que observar  a nuestras mascotas cuando hacemos cambios de alimentos ya que muchas veces puede afectarlas, y cómo lo notamos, con síntomas como colitis, pelaje más feo o incluso problemas de conducta porque se ponen más irritables al tener por ejemplo un aumento de gases que les puede generar un poquito de dolor abdominal y les cambia la conducta”.

De esta forma la Dra. Muñoz agregó que cuando el alimento que se entrega a las mascotas es óptimo, su nutrición también lo es, “y con ello se reducen las probabilidades de que generen problemas crónicos como la diabetes, las afecciones articulares u otro tipo de enfermedades”.

Al igual que para las personas, que existan en sus dietas los nutrientes adecuados como los Omega-3 y las vitaminas del grupo B, se logra un impacto positivo que se extiende a su salud metal y comportamiento. “Una mascota bien alimentada fomenta su vitalidad, logra adaptarse mejor a su entorno e incluso puede mejorar la relación con sus tutores”.

La Dra. Muñoz entregó algunos consejos para ser proactivos en la gestión de la alimentación de los “peludos de la casa”. “Siempre debe considerarse la calidad por sobre la cantidad y cuando se adquieran los alimentos leer que tengan fuente de proteína de alta calidad (como pollo, pescado o carne) y si además lleva incorporadas vitaminas tanto mejor. Nunca prepararles comidas con ajo o cebolla porque pueden producir anemias severas o colocarles muchos aliños a las preparaciones caseras porque les puede provocar problemas gastrointestinales y en esta época de fiestas jamás consentirlos con chocolates, que podría generar el mismo problema”.

A ello sumó que, para evitar cualquier problema, siempre se debe consultar con su médico veterinario, “el profesional es quien podrá definir cuál es la dieta más adecuada para la mascota considerando aspectos como raza, edad, tamaño y condiciones de salud particulares del animal”. En definitiva, asegurar que cada bocado sea nutritivo y seguro, consultando siempre a su veterinario, se garantiza que el compañero peludo disfrute de una vida plena, activa y feliz, puntualizó la experta.